SACRALIDAD DE LA VIDA HUMANA

"La vida es sagrada porque viene de Dios"

En uno de los colegios mas prestigiosos de Bogotá, unos adolescentes recibieron de uno de sus amigos, un mensaje de texto el cual decía: “Me he suicidado y me encuentro muy feliz por esto”.

Es cuestionante para las familias y para la sociedad en general, el hecho de que un joven, decida poner fin a su existencia y manifieste estar satisfecho por el hecho de hacerlo, alguien con toda la vida por delante, con la capacidad de soñar y de recrear su futuro y decide en un momento de inmadurez dar por terminada su existencia sin siquiera haber empezado a vivirla.

Es conveniente que padres de familia, jóvenes y educadores en general reflexionemos sobre la valía de la vida humana y sobre la manera como le estamos trasmitiendo este valor a los jóvenes; tenemos que tomar conciencia de que la vida no nos pertenece, no es algo que podamos quitar o poner a nuestro antojo, o ¿quien pidió ser traído a la existencia? ¿Quien eligió nacer en determinado lugar o circunstancia? Estamos aquí por que si; por que un ser superior, por amor, decidió tráenos a la existencia, la vida es un don de Dios, es un regalo, que se nos dio sin pedirlo, la vida no nos pertenece y por lo tanto no nos es licito quitárnosla, se nos ha dado para disfrutarla, estamos aquí para hacer de nuestra existencia, algo que valga la pena, cada quien es responsable de su propia vida y de sus propias decisiones y debe considerarla sagrada, lo mismo que es sacra la vida de los demás.

En resientes días nos alarmó la noticia de que unos taxistas iban a linchar a una persona que acababa de asesinar a uno de sus compañeros, los taxistas lo siguieron y de no ser por las autoridades, que intervinieron a tiempo y detuvieron al infractator, se hubiera cometido otro asesinato. Hemos llegado al extremo de no creer en las autoridades y de aplicar la justicia por nuestras propios medios “ojo por ojo diente por diente” la sacralidad de la vida del otro se ha perdido, toda persona, aunque sean horribles e injustos sus hechos, tiene derecho a que se le respete su vida y a un juicio justo por la inconveniencia de sus actos, no podemos llegar al extremo del anarquismo, sería entrar en una guerra fratricida, matándonos los unos a los otros por cualesquier inconsistencia humana.

La vida es sagrada desde el mismo instante de la concepción hasta su culminación natural, ya sea por enfermedad, accidente o por el desgaste natural que implica la subsistencia humana.

Y este valor hay que transmitirlo a las nuevas generaciones con el disfrute de nuestra propia coexistencia y el respeto que tenemos por ella y por la vida de nuestros semejantes, cabe cuestionarse si es esto lo que estamos enseñando, o por el contrario estamos dando un mensaje negativo sobre nuestra propia existencia, dejándonos apabullar por las dificultades que conlleva el estar vivo, mostrando que la vida es una carga que no soportamos y que no vale la pena vivirla. Por esto se suicidan muchos adolescentes, no le encuentran sentido a su paso por la madre tierra, por que nosotros tampoco le hemos encontrado el sentido a nuestra paso por el mundo, en el cual hemos sido plantados por aquel que nos ama, para conocer, amar y servir a Dios, del que venimos y al cual volveremos para participar de su eternidad bienaventurada.

GUSTAVONAR

gustavonar1@hotmail.com